domingo, 1 de abril de 2012

PESIMISMO


Quisiera cerrar los ojos por una vez y encontrar que esto es una pesadilla de la que no he despertado, es muy difícil negar que prácticamente nada está bien, que la práctica no ha sido efectiva y por ende mis intenciones de graduarme se están viendo truncadas por tantos motivos que se me han salido y algunos otros que se han salido de otras manos. Deseo comprender todo lo que sucede, entender que es lo que hago tan mal, cuales son las fallas tan grandes que he tenido, si es que tengo un pecado original, si tengo alguna deuda, si he incumplido una promesa, si he acabado alguna vida.

Nada parece grave pero lo es, mis problemas son tan problemas como los problemas de alguien más, tengo tanta incertidumbre que ya no me preocupo por asuntos importantes si no solamente por los necesarios, son tan graves que ya no puedo escribir nada feliz, están graves que lo único que está bien en mi vida es mi salud, y aunque eso podría ser suficiente no lo es. No puedo evitar mirar a mí alrededor y de inmediato ver venir una expresión de decepción hacia mi mente. No son solo mis problemas, son los problemas de los demás que de una u otra forma indirectamente me afectan y todo se convierte básicamente en un infierno en la tierra.

Creo que pensar tanto está acabando con la salud de la que he gozado, y aunque no tenga hijos por los que responder ni grandes deudas que cancelar es mi propia por la que no puedo dejar de preocuparme, la que no ha gozada de la vida que merece, la que poco a poco se desgasta y si nada me resulta se acabará sin pena ni gloria.

Si antes no era normal ahora menos puedo serlo, no me preocupan las mismas cosas que los demás, no me importan las mismas mierdas que el resto piensa, sencillamente yo sigo en otro camino y quienes quiero que lo entiendan no lo hacen, es muy difícil ser diferente a los demás, querer ser mejor que los de antes de ti, querer ser mejor que los del al lado, los de después, es incomprensible que no te comprendan, es inadmisible que no lo intenten, es triste que no les importe, es una mierda que les de la misma cagá. Y no vale la pena porque yo sigo muriendo y ellos riendo, yo tengo game over y los demás 1000 vidas más.

Es como si vieras millones de sonrisas allá y un oscuro sonido de lagrimas acá, como si todo pasa y nada sucede, como si llueve y no moja, si caminas y no avanzas, es todo lo malo que puedes imaginar al lado de todo lo malo que imaginas que imaginan el resto, es siempre pensar que eres mejor que los demás pero no vas a superarlo, es estar loco sin saberlo, es correr sin motivo, es vivir sin sentido.

Tener mil años y dos mil desgracias, todas inexistentes; es vivir mil emociones, novecientas noventa y nueve inconclusas; es cantar una canción sin melodía, escribir una nota sin destinatario, soñar con nadie, vivir con alguno, ser inseguro y morir en ayuno. Mirar menos en vez de más, dividir el bien y multiplicar el mal, sumar lo pésimo y restar lo no tan pésimo, llorar una piedra, talar un seco, brillar un oxido, lavar un limpio, escribir basura y botarla de una vez.

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