Todo vuelve a ser como antes, no es igual, han cambiado muchas cosas, soy mejor que antes, pero todo sigue funcionando en las mismas estaciones. Ya no se que decirle a mi cuerpo, ya no se cómo evitar mi corazón, ya no se tantas cosas que pensé que sabía.
Me pregunto cómo cambiará mi vida cuando pasen tantas cosas que estoy buscando, me pregunto cómo saltar estos precipicios; y tengo respuestas pero todas me llevan a algo que no puedo ser, a algo que no quiero ser.
Dónde están esos ojos por los que quiero mirar, dónde habita esa mujer que conocí hace algún tiempo, dónde están esos campos que he sembrado. Yo sigo ilusionado.
Todo se ve borroso y entre ello mil sonrisas sombrias apagando mis deseos, entre ello mi confianza y mi apoyo, entre ello un mar de arena que hace todo mas viejo y mas polvoriento. Dónde está todo eso que estoy buscando?
Llegan las dudas, 5000 preguntas, pensar si es que no soy merecedor de mis anhelos, si tantas batallas han sido una pérdida total, si estoy destinado a ser lo que tanto no deseo ser.
Y ese instante en que no puedo parar de recordar cosas tristes el que mas desprecio y del que me es mas difícil huir. Porque no quiero pensar tantas cosas, porque hay cosas que me han pasado de las que aún no he tenido razón porque me han sucedido, pero la vida me las va diciendo, porque ya me ha dicho muchas otras.
No es tristeza, es aburrimiento, sobredosis de paciencia, un lapsus que no quiero vivir.
