Se nos avecinan nuevas elecciones presidenciales, y como en toda contienda política, los opositores y los que se dejan llevar por la corriente sacan sus cartas para perjudicar cualquier estrategia o repunte en encuesta que lleva o llevan el o los candidatos que lideran la contienda.
El caso de Latinoamérica es especial sin ser Colombia ajena a ello, ya que se viven tiempos de reelección y para el candidato presidencial, existen muchas ventajas al ser reconocido por todos como el presidente y figurar en los medios de comunicación con frecuencia, pero de igual forma considero que las desventajas son aún mayores, al ser acusado con severidad de todas las acciones no cumplidas, de los índices de desempleo, de inseguridad y de la calidad de la educación. Para esa situación solo se debe comparar con base en el periodo de gobierno anterior, ¿qué se logró?, ¿qué y cómo se encontró? En realidad muy pocos tienen las bases y la información suficiente para deliberar objetivamente sobre los logros de la Presidencia de la República, recordando además que el presidente tampoco es autónomo en todos los aspectos y debe contar con la aprobación o el apoyo de las bancadas congresistas para acudir a la implementación de las políticas propuestas durante su periodo de campaña y posteriores.
Colombia es un país abiertamente democrático, donde tristemente la mayoría, se han o nos hemos acostumbrado solo a quejarnos porque papa gobierno no nos da las cosas que creemos merecer solo por ser colombianos, donde aunque en realidad no se esté muy lejos de eso, nos hemos hecho creer que los políticos son personas negras cuyo único objetivo es llenarse los bolsillos, gobernar a favor de sus familias y negocios y quejarse porque tienen sueldos miserables. Y dónde están nuestras acciones para cambiar eso, la mayoría ni siquiera sabe que tenemos en nuestras manos el verdadero poder, que existen derechos, mecanismos de participación ciudadana, y toda clase de instancias para salvaguardar nuestros derechos, ¡y nadie los usa!, solo nos quejamos una y otra vez, de cualquier amarillismo de medios opositores, de cualquier tendencia, nos amarramos de cualquier situación para expresar nuestro desacuerdo con todo, pero en realidad no hacemos nada. Muy pocos valientes lo hacen, muy pocos ejercen su derecho, muy pocos luchan por un mejor país, solo esperan los 50.000 del voto cada elección.
No estoy diciendo que las cosas estén bien, suceden cosas malas, obras paupérrimas, corrupción, atropellos, leyes que no debieron ser, sistema de salud pésimo, vías en mal estado y la suma sigue. Pero igual hay cifras por resaltar, a pesar de la inseguridad seguimos viviendo en un país donde aún podemos transitar con algo de tranquilidad, hemos dejado de ser reconocidos como el país de la droga, como un país lleno de diversidad cultural y lleno de mucha propiedad intelectual por explotar, se ha dinamizado su economía, se ha aportado mucho a la educación pública, no ha sido suficiente, pero se ha aportado, se han ampliado los programas subsidiarios, dentro de ella la cobertura de salud pública, en fin, también hay cosas buenas, por eso hace falta mucho por hacer.
Lo que me parece terrible de todo esto es que los jóvenes de hoy solo se preocupan por ganar amigos o followers, por ganar likes o shares, y no se instruyen sobre los contenidos que comparten, no saben de qué hablan, y solo publican por publicar, comparten por compartir, y difunden información que a su ignorancia solo les produce perjuicios porque promueve ideologías que muchas veces no son las de ellos. Se quejan del gobierno y dicen votar en blanco, por cosas que realmente me da pena compartir, se quejan pero no saben con bases en las leyes cuáles son sus derechos y cuáles son sus deberes como ciudadanos en ejercicio, ni saben de dónde salen los dineros con que funciona el país, que es la deuda externa y porque las cosas se ponen caras, y no perciben que la corrupción muchas veces proviene desde las entrañas de nuestra sociedad y en el gobierno solo se ve el reflejo de quienes nosotros mismos votamos para que nos representen y defiendan.
No repitamos como loros, lo que como personas no tenemos la certeza.
Elijamos no a conciencia, más bien con inteligencia!!!!!
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