No hay porque juzgar sin conocer eso ya estamos cansados de repetirlo, no hay porque juzgar si no conocemos de razones, la imagen es importante pero no lo es todo y recordemos que las apariencias engañan. Hay que tomarse la molestia de saber que hay detrás y que sucede verdaderamente si queremos tolerar y convivir, ningún humano en el planeta es juez moral para condenar a todo aquel que se equivoque u obre mal; todos tenemos predisposición a cometer miles de errores, a no ver bien quien esta con nosotros y quien no, quienes nos quieren de verdad y quienes nos tienen la mala, y como es que le entra el agua a el coco.
Porque voltear el mundo para hallar un culpable si muchas veces lo llevamos muy adentro, somos nosotros mismos los que nos destruimos, porque dañarle la vida a una persona si no somos capaces de organizar la nuestra, porque disparar si es alguien inocente es quien esta delante de la boca, porque disparar y matar veinte mil de un solo tiro. En este planeta nadie tiene el poder de penalizar espiritualmente, porque nadie sabe nada, cada loco con su cuento, cada cuerdo con su bola, lo único que existe es la igualdad en este mundo donde ninguno es superior al otro.
Las miradas hablan por si solas, las expresiones nos dicen más que las palabras, y porque hay que mirar mal a alguien si luce mal, porque catalogar de tal cosa a alguien por lo que pinta ser, porque juzgar si no sabemos quien es, porque negar el saludo, porque negar una sonrisa, porque no darla si alimenta tu alma y la de quienes están a tu alrededor, porque si hacerlo te sale al gratin.
Porque no darnos la oportunidad de hablar con todo el mundo, porque no codearnos entre humanos como personas, porque no destruirle mundo de apariencias si no solo se vive por la experiencia, porque no dar la mano a quien la necesita, porque no hacerlo si la suciedad, lo nefasto, las llagas y lo impuro te carcomen cuando no eres lo bueno, porque no hacer lo que quieras, lo que te salga del corazón, porque no ser espontáneo, porque no serlo si es que nadie corrompe a otro, uno se corrompe solito, porque decir mentiras para ser aceptados, inventarnos otras personas para poder convivir, porque pretender influir en las otras decisiones si al fin en este mundo ninguno es juez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario